Según la gente de allpar.com, aficionados y bien informados de todo lo que tiene que ver con Chrysler, la compañía ya tiene en marcha la solución a la problemática.
Es un hecho que el Viper no va a perder su característico V10, primero porque sería muy caro adoptar el V8 de sus hermanos menores, y segundo, porque iría en contra de su identidad. Pero al parecer, hay una vía para solucionar la situación.
Cuentan en allpar que Dodge ya ha desarrollado un V10 sobrealimentado por compresor volumétrico, que se ha instalado en una mula de pruebas para verificar sus capacidades. Aunque el motor podría dar mucha potencia en esta configuración, se habría capado a 800 caballos para no tener que someter al resto del coche a numerosas modificaciones en palieres, transmisión, chasis y demás.
Lo que no sabemos es cómo conseguirá meter un compresor volumétrico Dodge bajo el alargado capó del Viper, ya que por encima del colector de admisión no cabe, y en un lateral quedaría demasiado lejos de la propia admisión del motor.